Mi nombre es José Manuel Pérez Rivera y nací en Ceuta. Siendo pequeño se despertó en mí la vocación por la arqueología. Unos amigos del colegio me comentaron que en unos descampados del centro de Ceuta aparecían restos de cerámicas, llaves antiguas y monedas. Desde la primera vez que rebusqué entre la tierra tuve claro que de mayor quería ser arqueólogo. Todo lo que encontraba lo entregaba en la Sala Municipal de Arqueología de Ceuta. De esta forma entré en contacto con D.Emilio Fernández Sotelo, en aquellos años director de la mencionada institución museística ceutí. Pasado un tiempo me invitó a participar en una de las primeras excavaciones arqueológicas que se hicieron en Ceuta. Tendría entonces dieciséis años.
Una vez terminado el Bachillerato me fui a Granada donde pude cumplir mi sueño de estudiar Prehistoria y Arqueología. Pronto me incorporé a un equipo de investigación arqueológica y participé en distintas campañas de estudio de materiales, prospecciones y excavaciones arqueológicas, tanto en España como en el extranjero.
Tras completar los cursos de doctorado regresé a Ceuta y comencé una primera etapa como arqueólogo profesional. Entre los años 1999 y 2000 desempeñé el cargo técnico de coordinador asesor de Patrimonio Cultural en la Ciudad Autónoma de Ceuta y fui contratado durante varios meses como arqueólogo en la empresa municipal de la Vivienda de Ceuta.
En el año 2001 constituí junto a grupo de amigo la asociación Septem Nostra para la defensa, estudio y difusión del patrimonio natural e histórico de Ceuta, que aún sigue activa. Mi horizonte de intereses se abrió para abarcar otros asuntos al margen de la arqueología, como la conservación del medio ambiente. Fue así como conocí la obra de Lewis Mumford y de su maestro Patrick Geddes. De la mano de Mumford me adentré en el mundo de la filosofía y la literatura trascendentalista norteamericana de Ralph Waldo Emerson, Henry David Thoreau y Walt Whitman. La lectura de los diarios de este último fue el empujón definitivo que me hizo salir del hogar y dirigirme a la naturaleza para escribir.
Mis primeros cuadernos de naturaleza datan del año 2013. A partir de esta fecha no he dejado de pasear por la naturaleza ceutí y a escribir sobre ella.
El 2015 fue un año muy importante en mi trayectoria personal, profesional y literaria. A comienzos de este año me dejé llevar por un impulso incontrolable a escribir sobre el espíritu de Ceuta. En pocas semanas redacté los primeros capítulos del libro precisamente titulado “El Espíritu de Ceuta”. Pocos meses después sucedió algo extraordinario. Mis intuiciones sobre el espíritu de Ceuta se vieron confirmadas por una serie de hallazgos arqueológicos que inauguraban una nueva etapa profesional como arqueólogo en mi ciudad natal. Animado por estos descubrimientos espirituales y arqueológicos incrementé la frecuencia e intensidad de mis exploraciones del entorno de Ceuta. Los escritos de naturaleza redactados entre los años 2013 y 2016 forman parte de mi segunda obra publicada por la editorial Avant: “Arqueología del Alma”.
Mis salidas a la naturaleza, mis estudios sobre el espíritu de Ceuta y sobre los hallazgos arqueológicos realizados en mi segunda etapa como arqueólogo se han convertido en mis principales ocupaciones, sin dejar de lado la defensa del patrimonio natural y cultural.
En el plano profesional, actualmente dirijo la Unidad de Promoción y Desarrollo de la Delegación del Gobierno en Ceuta.